¿Tiene o no sentido lanzarle una sopa de tomate a una pintura para protestar en contra de las acciones que afectan el medioambiente? Ustedes tendrán su respuesta, por ahora, les dejamos algunas que nos ha dejado el 2022.

Hace unos días un acto de protesta le dio la vuelta al mundo en pocas horas. Se trató de la echada de sopa de tomate a una de las obras más emblemáticas de Vincent Van Gogh: "Los girasoles".

Las activistas, abanderadas del movimiento Just Stop Oil, el cual busca concientizar al mundo sobre las acciones negativas que causan empresas petroleras sobre el planeta tierra, no solo se pegaron las manos a la pared donde está colgada la obra sino que además, arengaron “¿Qué vale más, el arte o la vida? ¿Vale más que la comida? ¿Vale más que la justicia? ¿Están más preocupados por la protección de una pintura o por la protección del planeta y las personas?”.

A primera vista, un acto estúpido. Pero, con el paso del tiempo y la rapidez de su difusión, la protesta empezó a tomar un sentido, simbólico, que hizo que (por lo menos), todo el mundo hablara del tema y lo pusiera sobre la agenda pública. 

¿Tiene sentido? ¿Ayuda en algo? ¿Los museos tienen la culpa? ¿De verdad se puede lograr algo con esto? Esas y otras son preguntas que expertos han tratado de responder, cada uno con miradas y posturas diferentes. ¿Cuál es la suya? Les dejamos otros ejemplos de protestas climáticas contra obras de arte y les invitamos a reflexionar sobre el tema, siempre con una mirada más profunda de lo reaccionarias que se puedan tornar las redes sociales.

5. Pastel en la Mona Lisa

El 29 de mayo de 2022 un hombre vestido de mujer aventó pastel contra La Mona Lisa, aparentemente para manifestarse en contra del cambio climático. “Hay personas que están destruyendo la Tierra… Los artistas, piensen en la Tierra. Por eso lo he hecho”.

 

4. Puré de papa en un Monet

Hace unos días dos miembros del grupo activista por el clima “Letzte Generation” (“Última generación”) esparcieron puré de papa contra un cuadro de la serie “Les meules” (“Los almiares”) de Claude Monet, expuesto en el Museo Barberini de Potsdam, cerca de Berlín. “Cada vez más personas se niegan a aceptar en silencio la progresiva destrucción y puesta en peligro de la vida humana en nuestro planeta”, afirmaron las protestantes.

 

3. Torta de chocolate en la cara del Rey Carlos III

Pareciera que octubre de 2022 fue el mes de la “explosión de protestas climáticas” pues en este periodo, Eilidh McFaddden y Tom Johnson, cubrieron con torta de chocolate el rostro de cera del Rey, recién coronado, Carlos III. Los dos también son simpatizantes del grupo ecológico Just Stop Oil y en su comunicado exigen a su Gobierno que detenga la emisión de nuevas licencias y permisos de petróleo y gas.

2. Salsa de tomate sobre la 'La joven de la perla' de Vermeer

Este jueves 27 de octubre de 2022 tres miembros de Just Stop Oil derramaron salsa de tomate sobre 'La joven de la perla', obra icónica del pintor Johannes Vermeer, expuesta en una de las salas del museo Mauritshuis. Los activistas están acusados de un delito conocido como "ataque abierto contra bienes artísticos".

Uno de los miembros dijo: “La obra está protegida con un cristal mientras que la gente vulnerable alrededor del planeta no está protegida. Las personas en extrema pobreza tienen que elegir entre calentarse o comer, y no están protegidos”.

 

1. Pegados a la “La carreta de heno” de John Constable

En julio de este año dos activistas ecológicos de Just Stop Oil cubrieron un cuadro de la National Gallery de Londres con una imagen que simulaba un bucólico paisaje devastado por las energías fósiles. La obra es “La carreta de heno” de John Constable, pintada en 1821. Después de cubrirla procedieron a pegarse las manos a la pared haciendo una petición: el cese inmediato de cualquier nuevo proyecto petrolero y gasístico.