Debido a una publicación en su cuenta de Instagram, Adele está dando de qué hablar, esta vez por supuesta apropiación cultural indebida.

El pasado domingo 30 y lunes 31 de agosto se debía llevar a cabo la edición 2020 del Nothing Hill Carnival, un carnaval llevado a cabo en las calles del barrio Nothing Hill de Londres desde 1966 el cual celebra la cultura afrocaribeña británica. El evento ha reunido a millones de personas cada año lo que lo convierte en una de las festividades callejeras más importantes del mundo.

Este año, por razones que ya todos conocemos, la celebración se hizo de manera virtual reemplazando los desfiles y las muestras gastronómicas en shows musicales y de danza a través de streaming.

 

En el día del cierre del festival, la cantante británica Adele publicó una foto en su cuenta de Instagram luciendo un top con la bandera de Jamaica, plumas y un peinado con moños Bantú (propios de grupos étnicos melanoafricanos). Haciéndole un homenaje al carnaval, la artista escribió: “Feliz de lo que sería el Carnaval de Notting Hill, mi amado Londres”.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

A post shared by Adele (@adele) on

 

Con la publicación los comentarios no se hicieron esperar. Unos, señalando a Adele de apropiación cultural, mientras que otros, defendiendo su muestra de aprecio por la cultura afrocaribeña. 

Recordemos que en ocasiones anteriores, Adele ha sido acusada de racismo y apropiación cultural, ya sea o por cantar música que supuestamente no pertenece a sus raíces, o por vestirse con atuendos que utilizan elementos de culturas diversas, como el que usó en Glastonbury 2016, inspirado en la cultura egipcia

 

En 2017 Adele le dedicó uno de sus Grammys a Beyoncé (con quien cometía) diciendo: “Te adoro, quiero que seas mi madre”, lo que para muchos fue un comentario racista argumentando que “banalizaba” el sufrimiento de mujeres afro que criaron hijos que no eran suyos.

Pero volviendo a su publicación en homenaje al Carnaval de Nothing Hill, los críticos radicales expresaron su descontento en Twitter y en IG diciendo cosas como: "Si no ha entendido bien la apropiación cultural, mire la última publicación de Adele en Instagram. Ella debería ir a la cárcel sin libertad condicional por esto”, o, “Ningún blanco debería usar nudos Bantú, punto”.

 

Por otro lado, defensores de la cantante de 32 años, incluidas personalidades del entretenimiento, afirman que no se trata de apropiación cultural indebida y que simplemente es una muestra de cariño hacia una cultura con la cual Adele está relacionada pues nació y se crió en Tottenham, uno de los barrios de Londres con más población afrodescendiente, lugar donde se enamoró de la música de Ella Fitzgerald o Etta James.

El diputado laborista de Tottenham, David Lammy, describió la controversia como “tonterías” de Twitter, mientras que la modelo Naomi Campbell y el cantante Jamaicano Popcaan respondieron a la publicación con corazones y banderas de Jamaica.

Ahondando más en el tema, hubo seguidores que explicaron que lo que hizo Adele no es apropiación cultural sino que es apreciación cultural. "Esto no es una apropiación cultural, es una apreciación cultural. Ella está literalmente celebrando la cultura caribeña / jamaicana en un carnaval", expresó un usuario.

Históricamente la “apropiación cultural” significa la adopción o uso de elementos propios de una cultura por parte de alguien que no pertenece a la misma, siendo una práctica nociva la cual viola el derecho de propiedad intelectual de dicha cultura, argumentando que es un acto irrespetuoso y hasta profano. Esto en el caso de que se distorsione o se afecte el significado original de los elementos culturales ya sean tradiciones, comidas, símbolos, tecnologías, lenguas o manifestaciones artísticas.

¿Qué opinan ustedes? Mientras la polémica pasa, esperamos el nuevo trabajo discográfico de Adele, sucesor del “25” (2015), el cual se espera para finales de 2020 pero aún sin fecha oficial de lanzamiento según la propia cantante.


Le puede interesar: